Hipnosis para perder peso
¿Por qué comemos más de lo que necesitamos?
Si mantener el peso adecuado es una lucha para ti, o tu vida es un constante subir y bajar de peso, aun habiendo probado casi todas las dietas sin resultado, la hipnosis puede ser tu respuesta.
Cuando sentimos una amenaza o un peligro (real o imaginario), nuestro organismo reacciona con programas ancestrales de supervivencia. Lo primero que se activa es el programa de supervivencia. Queremos seguir vivos.
¿Y qué necesitamos básicamente para seguir vivos?
Agua y comida, por lo que empezamos a retener líquidos o grasas (energía). Si nos perdemos en un bosque o en la montaña, lo primero que haríamos seria dosificar la bebida y la comida.
Desde que nacemos, y durante nuestra infancia y adolescencia, hemos vivido experiencias en las que, a nivel inconsciente, hemos sentido una falta de protección y un desamparo enorme. Eso hizo saltar en nuestro interior una alarma de miedo e inseguridad, y eso desemboca en una serie de procesos y automatismos que frente a un desequilibrio afectivo en el futuro, buscara la manera de protegerse. Nuestro inconsciente reacciona igual, sólo que no distingue entre un peligro físico o emocional. Simplemente actúa frente a ese estímulo, y empieza a acumular agua y grasa.
¿Qué factores influyen en el sobrepeso?
- El síndrome del abandono. Es una necesidad biológica de protección de los padres.
- El conflicto de silueta. Cuando mantenemos un dialogo interno despectivo o negativo hacia nosotros, cuando nos infravaloramos constantemente. Cuando tenemos una actitud negativa ante nosotros, entramos en hipoglucemia. Entonces las células de nuestro cuerpo necesitan azúcar y la respuesta de nuestro cuerpo es comer más, o picar entre horas, entrando otra vez en esa rueda. El primer paso es aceptarte tal y como eres.
- El proyecto sentido (hasta los tres años) o la incorporación (hasta los siete) Esto tiene que ver con los estados emocionales de la madre, o de los deseos inconscientes de los padres por tener hijos fuertes y robustos para continuar con el clan o la tradición laboral familiar, etc.
Todos estos procesos son inconscientes, lo que significa que tú no te das cuenta. Tal vez quieres adelgazar, pero si tienes la creencia (inconsciente) de que tienes que trabajar duro, o de que hay que ser fuerte, o de que el mundo está lleno de peligros, probablemente te cueste tener un cuerpo esbelto y delgado, pue eso no sería lo más “adecuado” para sobrevivir en ese ambiente. También es posible que ante algún tipo de agresión (física o psicológica) tu cuerpo necesite sentirse grande como sistema de protección
Lógicamente los hábitos de alimentación y de ejercicio físico también influyen, aunque realmente son una consecuencia de nuestra forma de pensar. Es más fácil sanar primero mi inconsciente y luego cambiar mis hábitos alimenticios. Si me doy cuenta que la necesidad de comer excesivamente se debe a un miedo o a una carencia, podré cambiar ese estímulo.
¿Cómo es la sesión?
Primero te hago unas preguntas para conocer tus objetivos y motivaciones, y luego hacemos un ejercicio en hipnosis. Mediante un re-encuadre o una regresión, vas a poder acceder a esa información que te ayudara a tomar consciencia, a entender eso que paso y poder transformarlo, deshaciendo así el bloqueo emocional que te impide perder kilos y te hace comer convulsivamente o picar entre horas… En algunos casos basta con una sola sesión, en otros se debe hacer en varias sesiones para trabajar eso que sale a la luz.
¿Qué voy a experimentar?
Vas a experimentar un nivel de relajación muy profundo, y una agradable sensación de tranquilidad y seguridad. El hecho de “revivir” ese momento, lejos de ser traumático (se hace en estado de trance y disociado, es decir, lo ves como en una pantalla de cine), te aporta la comprensión necesaria para entender “que te paso” desde la visión de un adulto, con capacidad de comprender y poner nombre a todo lo que paso. El simple hecho de que te llamaran “gordita” de niña, puede hacer que eso se quede grabado en tu inconsciente y que te resulte muy difícil adelgazar, pues tú crees que eres gordita.
Si sanemos nuestra mente y sanemos nuestra alma:nuestro cuerpo, por sí sólo, cambiará.